“Esta Obra se DEDICA á los que tienen costumbres formadas, para vivir BIEN bajo el Gobierno monárquico en que nacieron, pero se DIRIJE á los que entran en una SOCIEDAD que no conocen, a los que necesitan formar costumbres de otra especie, para vivir MEJOR, bajo un gobierno diferente del que tuvieron sus padres”
S.R
El Proceso Bolivariano se enfrenta hoy a un Neocolonialismo que se impone tanto en lo económico como en los imaginarios, las lógicas y las mentalidades, un colonialismo intelectual, filosófico y cultural que se perfeccionó en los últimos 200 años con la creación de la burguesía y de la llamada “Revolución Industrial”, sus estructuras institucionales y sus medios de producción, un “Estado” funcional al modelo de sociedad que hoy todos conocemos, un neocolonialismo signado por el predominio del capital sobre las personas, y que además condiciona la existencia y las interrelaciones diarias. En este caso la Escuela del capitalismo son sus medios de información, y todo el entramado formativo que inventó para garantizar la reproducción de la división social del trabajo, la sociedad jerárquica y vertical que nos sigue dividiendo en clases sociales, una educación para el libre mercado y la imagen corporativa, lo que produce continuamente un conflicto entre quienes han sido despojados de todo elemento de soberanía y los que usurpan y expropian a los pueblos para mantener privilegios y riquezas, sosteniendo bajo esta relación lo que genera destrucción, miseria, pobreza, delincuencia y crimen, un modelo neocolonial que produce un simulacro de “sociedad” y en donde te puedes dar cuenta que en las poblaciones lo que realmente se promueve es el interés antisocial, individualista y egocéntrico.
El proyecto del maestro Simón Rodríguez consistía bajo el apoyo de la independencia lograda por las armas, la ruptura mediante la educación con ese orden colonial retrógrado de las castas y colores, con lo cual se establecería una Revolución económica muy distinta a la que diseñaron e impusieron las élites con su industrialización y su modelo fabril, empezando por una ESCUELA SOCIAL y una EDUCACIÓN POPULAR, que enseñaría desde la práctica las virtudes sociales, crearía comunas y además permitiera a las gentes AUTOGOBERNARSE, un ensayo para construir una sociedad nueva que pronto se encontró con la oposición de los teólogos de oficio y de las oligarquías locales, quienes han sido en este continente Abyayalano los continuadores y perpetuadores del colonialismo, y la plataforma desde donde se promueve y se lleva a cabo con más vigor que nunca el Neocolonialismo actual, bajo las órdenes de las transnacionales y de las corporaciones.
Siguiendo en el orden de las ideas de Rodríguez, su obra se dirige a quienes formarán parte de la Sociedad Republicana, a quienes necesitan desarrollar costumbres distintas para superar el colonialismo físico y mental, fue por lo tanto uno de los intentos de descolonización más audaces que se hayan llevado a cabo en su tiempo, que hasta pudo crear a un libertador como Bolívar, aún siendo éste de origen mantuano y de una de las principales familias terratenientes y esclavistas de la Venezuela colonial.
El Proyecto de Rodríguez fue y sigue siendo tan grande, que deja las bases para inventar desde los poderes creadores del pueblo su propia escuela, universidad o estructura social organizativa, la propuesta del maestro era la de enseñar a pensar al nuevo republicano para que no imitara servilmente lo que desde la Europa o los Estados Unidos llegara….Era y sigue siendo una propuesta educativa para construir un país endógenamente, considerando sus geografías y sus habitantes, un Estado Social muy comunitario y colectivista.
Si intentáramos hacer una comparación entre aquel tiempo histórico que le tocó vivir al maestro Simón Rodríguez y el que vivimos nosotros hoy, pudiéramos decir que en aquella oportunidad se trataba de ir a una sociedad republicana desde una realidad colonial, y que actualmente hacemos el intento de construir una sociedad socialista tratando de superar los obstáculos neocoloniales de una realidad capitalista, lo cual coloca el proyecto educativo emancipador de Rodríguez en plena vigencia, ya que su obra establece el método de la Escuela Social o de la Comuna-Escuela como epicentro de la formación de las nuevas interrelaciones sociales, lo cual lleva a refundar y a repensar las estructuras que sean pertinentes a los valores y principios del SER SOCIAL, siendo la metodología la praxis social, el aprendizaje desde la práctica para entender las ciencias y la convivencia, la construcción en su conjunto de la TOPARQUÍA.
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